Es muy difícil conocer exactamente cuál es la verdadera motivación de la persona que escribe algún artículo o nota, no podemos ver sus ojos, ni tampoco podemos ver su corazón. En estos días podemos observar por los comentarios que se levantan, que muchas réplicas son la respuesta a una comprensión equivocada y peligrosa frente a una publicación. Por eso debo comenzar diciendo que no es mi intención atacar a las personas que se mencionarán, ni a sus ministerios; sino que debemos aprender de los errores en que han caído algunas personas públicas en sus ministerios, para que nosotros no caigamos también en aquellos errores; más aun considerando que son almas a las que nosotros debemos aconsejar y, como en los presentes casos, sus vidas dependen de una consejería bíblica y responsable.
Esta entrada, como el título de la misma lo dice, tiene que ver con la consejería cristiana acerca del suicidio, y los desenlaces fatales que tuvieron los consejos que algunos pastores hicieron a miembros de sus iglesias (personalmente no creo que hayan sido creyentes), donde los aconsejados terminaron suicidándose.
Por ello, mi labor en esta entrada se concentra más en la traducción de algunas partes de un par de documentos que corresponden a la demanda que hizo la familia Nally en contra de la iglesia Grace Community Church y los pastores MacArthur, Rea, Thomson, entre otros, por mala práctica en consejería que culminó en el suicido de Kenneth Nally.
El primer link desde donde he traducido, y que provee las referencias de los folios de la demanda, se encuentra en: http://digitalcommons.law.scu.edu/cgi/viewcontent.cgi?article=1484&context=lawreview
Otra iglesia cuyo pastor cree de la misma manera: “que un cristiano se puede suicidar y aun llegar al cielo” y que tiene en su sitio web la referencia del suicidio de tres miembros de su congregación, es la del pastor John Piper, cuya traducción de su posición al respecto y los enlaces de los mencionados suicidios se proveerán en la segunda parte.
El suicidio de Kenneth Nally, miembro de la Iglesia Grace Community Church
Los folios que se adjuntan en el documento comienzan con el número 467, voy a utilizar estos folios para que se puedan identificar los lugares desde donde he hecho la traducción.
En la página 467, al inicio se declara cual es la causa de la demanda que se interpone contra la iglesia en mención:
“que los demandantes pueden entablar una demanda por la falla negligente para prevenir un suicidio, en contra de los consejeros pastorales afiliados a Grace Community Church” ("la Iglesia")Luego, hasta la página 488 se tocan temas que tienen que ver con las cuestiones relacionadas a las leyes y jurisprudencias norteamericanas, pero a partir de esa misma página, se comienza con lo relacionado al juicio “Nally versus “la Iglesia” En las páginas 488, 489 y490 se describen los hechos de este juicio:
Los consejeros no-terapistas en Nally (se refiere al caso) eran miembros de Grace Community Church of the Valley, una gran congregación cristiana protestante, la cual ofrece consejería pastoral a los miembros de la iglesia “en asuntos de fe, doctrina y la aplicación de principios cristianos” Los pastores Thompson, Rea y Barshaw quienes estaban entre los treinta consejeros quienes proveían “consejería bíblica” en la iglesia, testificaron que ellos no solamente poseían competencia para tratar una gran variedad de enfermedades mentales como la depresión y la esquizofrenia, sino también tenían amplia experiencia en la consejería de personas con tendencias suicidas u homicidas. Su literatura incluye una “Guía para Consejeros Bíblicos” también profesaron que en ausencia de una causa fisiológica grave, como un tumor cerebral, ‘cada problema emocional’ estaba dentro de la competencia del consejero pastoral “incluido” el abuso de drogas, alcoholismo, depresión severa, suicidio, manías, crisis nerviosas, trastornos maniaco depresivos y esquizofrenia.
La relación de consejería entre Nally y los terapistas de la iglesia se inició cuando Nally comenzó a asistir a la iglesia en 1974 mientras él estaba estudiando en la Universidad de Los Ángeles en California (UCLA). En los inicios de 1978 él estableció una “relación de discipulado”, una forma de consejería basada en la religión, con el pastor Rea, durante la cual ellos discutieron los problemas familiares y de noviazgo. Después del rompimiento con su novia en Diciembre de 1978, Nally se puso cada vez más deprimido y una vez más asistió a las sesiones de discipulado con el pastor Rea. Además, Nally buscó el tratamiento de dos médicos, y él fue prescrito con antidepresivos.
Durante una sesión de consejería con el pastor Rea en Febrero de 1979 Nally indicó que había considerado el suicidio en 1974 mientras era estudiante en la UCLA. En Marzo de 1979 Nally intentó suicidarse por una sobredosis de drogas y fue hospitalizado. Durante su hospitalización Nally le dijo al pastor MacArthur que él lamentaba que no haya tenido éxito en su intento de suicidio. Él le dijo al pastor Rea que si se daba la oportunidad después de su alta del hospital, él intentaría suicidarse de nuevo. Ningún pastor transmitió esta información a ningún médico o a la familia Nally. Si bien un siquiatra del staff recomendó que Nally sea encargado a un hospital siquiátrico, la familia Nally escogió que sea un paciente no-hospitalizado. Nally fue dado de alta y se mudó con el pastor MacArthur.
Once días antes de su suicidio, Nally le preguntó al pastor Thomson durante una consejería espiritual, si un cristiano, no obstante que se suicida, es “salvo” Thomson respondió que “una persona que es salva, es siempre salva”
Thomson posteriormente remitió a Nally a un médico para exámenes, pero no a un siquiatra. Cuando Nally se encontró con Thomson varios días después y le dijo que estaba considerando ver a un sicólogo, Thomson recomendó a Nally que contacte al director de la Escuela de Graduados de Sicología Rosemead, Dr. Mohline. Después de una visita de noventa minutos, Mohline lo remitió a la Clínica Sicológica Fullerton, donde él vio a un sicólogo asistente.
Varios días después, la ex novia de Nally rechazó una aparente propuesta de matrimonio diciendo: “tienes que tranquilizarte”, “tú tienes que poner a Dios primero en tu vida” Dos días más tarde se encontró a Nally muerto de una herida de bala auto-infringida.
Otra página web que provee más detalles en el caso dice lo siguiente en la sección III Antecedentes del proceso A. Los alegatos de la demanda:
La tercera acusación incorporó los alegatos de negligencia en función, y acusan a los acusados con conducta indignante por enseñar ciertas doctrinas religiosas protestantes que estaban en conflicto con la crianza católica de Nally y la cual “contrariamente agravó” “los sentimientos pre-existentes de culpa, ansiedad y depresión” de Nally (En este contexto, los demandantes alegaron que uno de los acusados {Página 47 Cal3d 288} dijo a Nally que la paralización temporal de su brazo, causada por su intento de suicidio fue “Dios castigándole” por su pecado. Los demandantes también alegaron que la conducta de los acusados en la consejería a Nally fue indignante porque ellos “enseñaron o de otra manera infundieron [a Nally] a quien conocían se deprimían y tenía pensamientos que acariciaban el suicidio con la idea que si él había aceptado a Jesucristo como su salvador personal [él] seguiría siendo aceptado en el cielo si él cometía suicidio. En este caso, los demandantes se basaron en la declaración de Thomson a Nally 11 días antes de su suicidio, que uno quien es salvo es “siempre salvo” y en un breve pasaje tomado de una serie de doce partes grabadas en cintas, titulado “Rick Thomson: Principios de consejería Bíblica” que era una grabación del pastor Thomson de 1980 en las enseñanzas de clase a los estudiantes de seminario.El link donde encontraran este párrafo anterior es este: http://profj.us/nally.htm
El pasaje de la cinta grabada fue registrada 18 meses después del suicidio de Nally, y declaró, en la parte pertinente: “Y el suicida dice ‘yo estoy bajo tal presión tremenda, ¡ahora he llegado a tener el placer de la liberación! ¡Ahora! ¡No me importa el futuro!’ Eso es característico de la naturaleza humana. Así que es muy característico del suicida su temor al juicio que le lleva a la muerte después de la cual él tiene que enfrentar tal juicio, si él es un incrédulo. Y después del cual, si él es un creyente, él irá con el Señor.
El suicidio de tres miembros de la iglesia del Dr. John Piper
La revista Christianity (Cristianismo) toma de las palabras que fueron pronunciadas por el Dr. John Piper en la meditación durante el funeral de un “cristiano” que cometió suicidio, para responder a la pregunta ¿Trae el suicidio condenación? La respuesta comienza citando Mc 3:28-29.- “De cierto os digo que todos los pecados serán perdonados a los hijos de los hombres, y las blasfemias cualesquiera que sean; pero cualquiera que blasfeme contra el Espíritu Santo, no tiene jamás perdón, sino que es reo de juicio eterno” y el Dr. John Piper continúa diciendo:
Solamente una cosa pone a una persona más allá del perdón: Blasfemar contra el Espíritu Santo. Pero esto no es un hecho singular, porque Jesús dice que cualquier pecado, o todos los pecados, y blasfemias serán perdonados a aquellos quienes le siguen. No. La blasfemia contra el Espíritu de Dios es tratar al Espíritu como sucio por resistir y rechazar su llamado al arrepentimiento de manera continua y persistente hasta la muerte.Este es el link sobre las palabras citadas: http://www.christianity.com/theology/theological-faq/does-suicide-bring-condemnation-11553479.html
Ni un solo pecado, ni siquiera el suicidio expulsa a una persona desde el cielo al infierno. Uno cosa sí lo hace: el continuo rechazo al Espíritu de Dios. Nuestro amigo (la suicida), creemos, renunció a tal resistencia y aceptó el perdón de Cristo. ¿Qué clase de debilidad momentánea, qué breve nube de desesperanza la llevó a ella a quitarse la vida? Esto permanece en el misterio. Pero nadie puede decir esto: que su último acto es imperdonable. Tampoco cualquier otro acto por cualquiera de nosotros. Porque Jesús dijo: que todos los pecados serán perdonados a los hijos de los hombres si ellos renuncian a resistir al Espíritu y buscan a Jesús para salvación.
Los links tomados directamente del sitio web “Desiring God” de las meditaciones en los funerales de los “cristianos” que se suicidaron son los siguientes (se puede usar cualquier traductor en línea):
http://www.desiringgod.org/resource-library/sermons/funeral-meditation-for-a-christian-who-committed-suicide-1981
http://www.desiringgod.org/resource-library/sermons/funeral-meditation-for-a-christian-who-committed-suicide-1988
http://www.desiringgod.org/resource-library/sermons/funeral-message-for-luke-kenneth-anderson
Como observamos, existe un peligro en la vida real cuando se enseña de manera contraria a la Palabra de Dios en cuanto a la posibilidad que exista un “cristiano-suicida”
Quiero expresar unas cuantas palabras mías bajo la autoridad de las Escrituras: Personalmente creo que un cristiano no llega al suicidio pues Cristo intercede eficazmente por los suyos para que su fe no les falte; por ello, la consejería a estas personas que abrazan el suicidio como una opción de librarse de las aflicciones y los problemas, debe ser la de predicarles el evangelio y hacerlos ver que es muy posible que Cristo no los haya salvado, debido a la falta de confianza que expresan sus palabras, de la misma manera en que lo hacia el apóstol Pablo diciéndoles: “pues nuestro evangelio no vino a vosotros solamente en palabras, sino también en poder y en el Espíritu Santo y con plena convicción” (1Th 1:5) De la misma manera, leemos en la Biblia diversas aseveraciones apostólicas tales como: “yo peleo”, “yo corro”, “yo pongo mi cuerpo en servidumbre”, “limpiémonos”, “trabajemos”, “despojémonos de todo peso”; cosas para las cuales Dios capacita a sus redimidos para poder realizarlas y terminar la carrera perseverando por el Poder del Espíritu Santo.
Quiera Dios que los corazones de los pastores-consejeros sean movidos hacia las Escrituras y no hacia las posturas de hombres, no sea que seamos juzgados como médicos inútiles, como dice la siguiente Escritura:
Mas vosotros sois forjadores de mentiras; todos vosotros sois médicos inútiles. ¡Quién diera que guardarais completo silencio y se convirtiera esto en vuestra sabiduría! (Job 13:4-5 LBLA)