¿En verdad debemos de olvidarnos de ciertas palabras teológicas porque suenan muy duras? Evidentemente que debemos examinarnos para conocer la actitud de nuestro corazón cuando las decimos. Por ejemplo, cuando me llaman “calvinista” ¿debo sentirme ofendido? Creo que no, ya que así es el apodo que la terminología teológica ha puesto a todos los que creen en las Doctrinas de la Gracia (soteriología calvinista o los Cinco Puntos del Calvinismo)
Personalmente creo que hay una sombra de ecumenismo religioso o inter-denominacional, que mueve los corazones de algunos hermanos, para no utilizar tales calificativos que se encuentran en cualquier libro respetable de teología. Espero estar equivocado en este punto, pero el tiempo nos lo dirá.
Ahora vayamos al título de la entrada ¿Es un insulto llamar al papa “anti-Cristo”?
La hermandad de los Bautistas Reformados (Reformed Baptist Fellowship) ha publicado una entrada sobre este tema titulado “El Ascenso del Anticristo”, y a manera de conclusión se escribe (y traduzco):
¿Qué debemos decir?
¿Es insultante? ¿Debe llamarse sin remedio a la cabeza de la fe de otra persona “el anti-Cristo”? ¿No sería más civilizado sonreír y decir: qué hombre más agradable y humilde, y que encantados estamos de que él apoye el matrimonio tradicional y se oponga al aborto?
Si los apóstoles son un ejemplo para nosotros, entonces debemos tener en cuenta que parte de proclamar las buenas noticias, es oponerse a la herejía en todas sus formas. Esa es la razón por la que Pablo escribió en Gálatas 1:8-9 “Mas si aún nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema.”
¿No estaba Pablo siendo horriblemente descortés? ¡Por supuesto que sí! Pero él estaba dispuesto a aceptar el consiguiente desprecio amontonado sobre sus palabras. Como Pablo dijo en el versículo siguiente “Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo.”
Como siervos de Cristo, los pastores fieles no tienen opción, sino identificar al anticristo cada vez que se exalte. Esto no es “anti-catolicismo” nosotros amamos a nuestro prójimo católico ¡Los amamos tanto que preferimos que no vayan al infierno! Para tal fin, cada ministro fiel del evangelio debe hablar la verdad. El papa Francisco es el anticristo. Él es el hombre de pecado y el hijo de perdición y un día él será destruido por el resplandor de la venida del Señor.
Yo esperaba que explicaran porqué es el Anticristo. Yo sé que lo es, pero creo que era necesario aclararlo. Y dejar también en claro que no sólo la persona de Bergoglio es el Anticristo, sino el mismo título de Papa.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo, el papa ha usurpado el lugar de Cristo, al autodenominarse cabeza de la iglesia e infalible, no ver este gravisimo error es aceptar otro evangelio.
ResponderEliminarHermano Fernando, gracias por comentar.
ResponderEliminarEl mismo artículo hace un resumen de cuatro puntos por el cual debe llamarse al papa romano como anticristo. Cita 2 Tesalonicenses 2:1-12 y resume 4 puntos:
1. Él buscará imponer la fe en él mismo por toda la tierra.
2. Él se llamará a sí mismo como dios.
3. Él se promoverá a sí mismo con falsos milagros.
4. Él engañará a los hombres para que crean en una mentira que no salva; sino que, por el contrario, condena.
Parece que es un buen resumen, aunque hay otros pasajes que también situarían en la posición de “anticristo” al papa romano. Bendiciones.
Hermano Rene, gracias por su comentario.
ResponderEliminarUrsurpar el lugar de Cristo, es hacerse una deidad.