jueves, 29 de mayo de 2014

Confesional en Nombre Solamente


Algunas veces las personas dicen que creen algo, pero es muy difícil de decir. Mientras ellos verbalmente están de acuerdo con una idea o hecho determinado, sus acciones pueden estar decididamente yendo en la dirección contraria. En el ámbito político hay quienes son conocidos como RENSs, o “Republicanos en Nombre Solamente”. Son aquellos quienes, mientras hay una plataforma partidaria a la que ellos pertenecen y dicen representar, en realidad van en contra de ella con sus decisiones políticas. Ellos alegan que son parte de un grupo y sin embargo pelean contra los ideales del mismo grupo que dicen representar.

Dentro del cristianismo tenemos una situación muy similar, tenemos aquellos quienes son “Confesionales en Nombre Solamente” o los CENSs. Los CENSs son aquellos quienes alegan sostener un credo, declaración doctrinal o confesión histórica; pero que después, en sus acciones o enseñanzas, van directamente en contra de la confesión que ellos dicen sostener.

Ahora, esta entrada no es una polémica acerca de niveles de suscripción a una confesión, yo creo que hay un caso razonable para la concesión de ciertas excepciones dentro de una confesión. Esta entrada es, no obstante, un llamado a la claridad. Si usted no cree algo, entonces dígalo, no actúe como si lo creyera para luego violarlo. Una de las razones para tener todavía una confesión es, en primer lugar, por causa de la claridad en asuntos doctrinales; no ser claro sobre un desacuerdo personal  destruye la misma razón para la existencia de una confesión. Una confesión, como su nombre mismo lo sugiere, no es principalmente el documento o la pieza de administración organizativa, es algo que es en realidad “confesado”. Si usted dice que lo confiesa, cuando usted en realidad no lo cree, simplemente usted es deshonesto.

Digamos por ejemplo, por supuesto de manera hipotética, que alguien afirma sostener la Confesión de Fe de Westminster. Esta persona luego insinúa que la santificación no está relacionada con el esfuerzo del creyente por obedecer la Ley de Dios, y que al hacerlo indica un entendimiento de obras de justicia en la justificación. Bueno, la Confesión de Westminster habla muy claramente en contra de esa idea en el capítulo 13 de la santificación, el capítulo 16 de las buenas obras y el capítulo 19 de la ley de Dios. Tal persona tendría que, o bien traer su enseñanza en línea con la Confesión, o declarar claramente que él cree que la Confesión de Westminster es anti-bíblica en dichos puntos. Lo que no es una opción, sin embargo, es pretender sostener la Confesión de Westminster en estas áreas mientras se enseña en contra de ellas.

La tentación para un CENS es simplemente cambiar las definiciones de las palabras de una confesión en una muy floja, suelta o relajada, cualquier cosa que yo quiero que digan, una pila de sinsentidos. Es absurdo como cuando alguien dice sostener la Trinidad como un Dios en Tres Personas, en tanto que “Personas” en realidad signifique “manifestaciones”. Es reclamar sostener una posición mientras distorsiona la definición en la mente suya para hacer que signifique lo opuesto. Es una táctica de cruzar los dedos en su mente de tal forma que usted pueda afirmar algo verbalmente mientras que no se sienta que usted está mintiendo. Un CENS puede decir: “Sí, yo confeso completamente A” mientras que en sus mentes ellos saben completamente bien que cuando ellos dicen “A” en realidad quieren decir “Q”. Es un juego de la mente posmoderna que algunas veces es jugado por aquellos quienes desprecian tales cosas si se hacen con el texto bíblico. A menudo es muy claro lo que se quiere decir por una declaración confesional, y también es muy claro lo que otros entienden lo que esas palabras significan. Si usted afirma algo, sabiendo muy bien que usted tiene alguna definición secreta en su mente para llegar a los que le rodean, es simple y llanamente un falso testigo.

Una de las formas más claras para detectar a un CENS es mediante el examen de su enseñanza. Es fácil decir que usted cree algo, ponerlo en un estante y nunca tocarlo otra vez a menos que una controversia se levante. Luego usted puede desempolvar la confesión y apuntar a la línea punteada con su firma, y proclamar que usted firmó algo en el pasado para silenciar la controversia. A veces esta es una forma válida de limpiar las cosas, pero otras veces es ceguera. El hecho es que si usted confiesa verdaderamente lo que una declaración enseña entonces debe reflejarse por lo que sale de su boca. Si usted dice que sostiene algo, entonces su enseñanza debe estar conformada por la declaración confesional a la que usted afirma estar adherido. Si usted se sienta bajo la enseñanza de alguien por el tiempo suficiente, usted debe ser capaz de tener una muy buena estimación de cuáles son los compromisos confesionales sin que siquiera sean dichos directamente. Si usted no lo puede decir, o incluso si lo que es enseñado es consistentemente en contra de posturas confesionales, entonces aquella persona es Confesional en Nombre Solamente (CENS) ya que la confesión que el tal alega obviamente no afecta su enseñanza doctrinal real.

Entiendo que las personas puedan tener preguntas o ellas pueden haber confesado algo previamente lo cual ahora causa en ellas conflicto de conciencia. Si este es el caso, entonces hágales saber a aquellos a los que usted es responsable. O deje que ellos le ayuden en este asunto con el que usted está luchando, o camine en integridad y sea honesto acerca de lo que usted está en desacuerdo. Existe la tentación de decirle a la gente lo que ellos quieren oír, o de minimizar las diferencias con el fin de ganar aceptación, especialmente entre los hombres jóvenes que desean la ordenación. Entre aquellos quienes están ya ordenados, gran parte de su vivo gueto y permanencia en una iglesia o denominación es a menudo relacionada con sus adherencias confesionales, de esta manera se convencen a sí mismos ir encubiertos y actuar como si la confesión no existe. Pero esto es conducir el ministerio bajo una pretensión falsa, y es tanto dañina como confusa para su gente. Es injusto decir que usted les está enseñando a ellos algo que usted en realidad no lo hace, o que usted está de acuerdo con una confesión que usted de hecho viola. El mundo secular tiene en realidad un término para esto: PUBLICIDAD FALSA.

 Escrito por Eric Ayala

http://www.covenantlegacy.com/confessional-in-name-only/

sábado, 24 de mayo de 2014

El escándalo por abuso sexual de menores en Sovereign Grace Ministries(SGM); y la indiferencia e idolatría que Dios condena

Ex líder de jóvenes de Ministerios Gracia Soberana (Sovereign Grace Ministries) fue condenado por abuso sexual, CJ Mahaney y Joshua Harris renuncian a La Coalicion por el Evangelio (The Gospel Coalition)

La revista “Cristianismo Hoy” (Christianity Today) está reportando que CJ Mahaney y Joshua Harris, ambos figuras de Ministerios Gracia Soberana (SGM) han renunciado a la Coalición por el Evangelio (TGC) una organización para-eclesiástica de la cual ambos eran miembros, tras la condena del ex-líder de jóvenes de Ministerios Gracia Soberana (SGM) Nathaniel Morales por múltiples cargos de abuso sexual infantil.

El ex líder de Ministerios Gracia Soberana (SGM), y que se ha convertido en denunciante, Brent Detwiler, ha escrito extensamente en su blog sobre el actual escándalo de abuso sexual en Ministerios Gracia Soberana (Sovereign Grace Ministries)

Si bien reconozco cuán difícil es este tema, pienso que es importante para nosotros como cristianos pensar en este tema desde una perspectiva bíblica. Sabemos por la Biblia que el corazón del hombre es propenso a la idolatría, y la idolatría puede tomar muchas formas, incluyendo elevar a algunos hombres y ponerlos por encima de cualquier reproche. De acuerdo con algunos ex-miembros de de SGM (entre ellos Brent Detwiler), este fue el patrón de comportamiento en el Ministerio Gracia Soberana. También, debemos tener cuidado de la iglesia que sutilmente moldean a sus congregante, o les transmiten la sensación que ciertos líderes están por encima de ser cuestionados o de rendir cuentas. Habiendo estudiado el abuso espiritual muy extensamente en los dos años pasados, puedo afirmar que esto es algo que ocurre aun en buenas iglesias, con buena doctrina y buena enseñanza. Aferrémonos siempre a la Palabra de Dios y nunca tengamos miedo de, amorosamente y con la Biblia en mano, hacer preguntas al liderazgo de nuestra iglesia, y desafiemos las respuestas que recibimos, si es necesario. El caso de Abuso sexual en Ministerios Gracia Soberana (Sovereign Grace Ministries) debe ser un recordatorio aleccionador para hacer eso.


JUSTICIA

La justicia para los débiles y desprotegidos es un asunto importante. Es un asunto importante para Dios, y debe serlo para nosotros como cristianos. Obviamente yo no me refiero a una justicia social o alguna clase de evangelio social, sino más bien en el sentido en que debemos cuidar a los miembros del cuerpo de nuestra iglesia como si ellos fueran miembros de nuestra propia familia de sangre. Un concepto que fue un gran alimento para mí el año que estudié a Isaías fue que Dios está enojado con aquellos quienes no buscan la justicia. Dios también desprecia a aquellos que en autoridad, especialmente autoridad espiritual, hacen presa del débil e indefenso que está bajo su cuidado:

 Isa 1:17 aprended a hacer el bien; buscad el juicio, restituid al agraviado, haced justicia al huérfano, amparad a la viuda.

Isa 1:23 Tus príncipes, prevaricadores y compañeros de ladrones; todos aman el soborno, y van tras las recompensas; no hacen justicia al huérfano, ni llega a ellos la causa de la viuda.

Isa 5:22-23 ¡Ay de los que son valientes para beber vino, y hombres fuertes para mezclar bebida; los que justifican al impío mediante cohecho, y al justo quitan su derecho!

Isa 10:1-2 ¡Ay de los que dictan leyes injustas, y prescriben tiranía, para apartar del juicio a los pobres, y para quitar el derecho a los afligidos de mi pueblo; para despojar a las viudas, y robar a los huérfanos!

Isa 56:1 Así dijo Jehová: Guardad derecho, y haced justicia; porque cercana está mi salvación para venir, y mi justicia para manifestarse.

Isa 59:4 No hay quien clame por la justicia, ni quien juzgue por la verdad; confían en vanidad, y hablan vanidades; conciben maldades, y dan a luz iniquidad.

Isa 59:14-15 Y el derecho se retiró, y la justicia se puso lejos; porque la verdad tropezó en la plaza, y la equidad no pudo venir. Y la verdad fue detenida, y el que se apartó del mal fue puesto en prisión; y lo vio Jehová, y desagradó a sus ojos, porque pereció el derecho.

 Sí, la justicia le importa a Dios. Es un asunto importante para Dios, y debe ser un asunto importante para nosotros. Debemos recordar que la iglesia tiene la responsabilidad de proteger al indefenso y al débil… en otras palabras, aquellos quienes no pueden protegerse a sí mismos y están a menudo a merced del mundo (los huérfanos, las viudas, los niños) ¿Estamos preparados para hacer esto en el caso de Ministerios Gracia Soberana (Sovereign Grace Ministries)?, ¿O es demasiado doloroso y desagradable verlo y pensar en ello? Quizás deberíamos acercarnos a esto como si fueron nuestros propios hijos quienes fueron abusados. ¿Te gustaría que otros sean suficientemente valientes para hablar y buscar protección y justicia para tus hijos? Entonces te exhorto a que hagas así por los hijos quienes no son tuyos físicamente, pero que pertenecen al Cuerpo de Cristo, como si ellos fueran tus propios hijos.

 Tomado y traducido de: http://www.solasisters.com/2014/05/former-sovereign-grace-youth-leader.html