sábado, 10 de diciembre de 2011

El Calvinismo Rápido y Sucio (Por Phil Johnson)

Hace años leí esta entrada del pastor Johnson. Fue escrita en el 2005 y el título original es “Quick-and-Dirty Calvinism” donde comienza diciendo “El calvinismo que golpea está de moda en los blogs. Ahora es mi turno” He traducido poco más de la última mitad de la entrada, donde me parece que se refleja más la idea que el autor quiso transmitir. Al final, el pastor Johnson aconseja recurrir a los autores calvinistas históricos antes que a los blogs, los foros y otro medio de internet. Dicho sea de paso, ese fue precisamente el consejo que los ancianos me dieron cuando yo comenzaba a construir mi teología.

Puede ser que alguien no esté de acuerdo con lo que este siervo dice. El website donde se encuentra esta publicación es http://phillipjohnson.blogspot.com/2005/06/quick-and-dirty-calvinism.html Allí puede escribir su desacuerdo (o sus insultos) pero debe hacerlo en idioma Inglés.

Me he tomado el tiempo en traducirlo con la esperanza que estas palabras puedan llevar a la reflexión a cristianos sinceros, pero que están equivocados por no “escudriñar” en las Escrituras y en la historia, los extremos que hoy se enseñan en algunos lugares de internet. Bendiciones.
Tengo que admitir con todo candor que yo puedo de alguna manera entender los sentimientos expresados por algunos críticos recientes del calvinismo. Olfatee usted alrededor de algunos de los foros calvinistas en Internet y no pasará mucho tiempo antes de empezar a pensar que algo está podrido en Ginebra.

Pero me apresuro a añadir que yo no pienso que el problema se encuentre realmente en Ginebra, o en el calvinismo histórico, o en alguno de los clásicos credos reformados. Sobre todo no creo que la pestilencia se deba a algún problema con el calvinismo per se. A mi juicio, el problema es muy reciente por la versión baja y sucia del calvinismo inexperto que ha florecido sobre todo en Internet y ha sido posible sólo por los nuevos medios de comunicación.

El Calvinismo de Internet y el Calvinismo Histórico algunas veces tienen poco en común. Considere:

 Fanatismo Las variedades de hiper-calvinismo que están floreciendo hoy en día son más duras e hiper que cualquiera de los históricos hiper-calvinistas alguna vez se pensó que podían ser.

Si usted duda de esto, revise el infame sitio web de Marc Carpenter, y lea su ridículo “Salón de la Vergüenza Heterodoxa” Carpenter es tan hiper-calvinista que él incluso ha marcado a Calvino como un hereje condenado al infierno ¡por no ser lo suficientemente calvinista! El condena a Spurgeon, Iain Murray y aun a Gordon Clark (a quien nadie durante su vida jamás acusó de no ser lo suficientemente calvinista).

Hay algunos muy concurridos foros de discusión allá que parece que ellos están teniendo una pugna por ver quien puede ser el más extremo en sus condenaciones al Arminianismo, o más exagerados en sus afirmaciones de “super-alto-calvinismo”

Hay un extremismo radical entre los “hipers” en internet que es absolutamente inaudito, incluso en los rincones más oscuros de la historia hiper-calvinista. Al menos los hiper-calvinistas tempranos como Huntington y Gill tuvieron algo beneficioso que decir cuando ellos hacían exégesis de las Escrituras.

No-evangelismo Entre las más corrientes calvinistas dominantes, sin duda hay algunos hombres destacados con fervor evangelizador (Piper, MacArthur y aun Sproul) Pero sería forzar las cosas, más que un poco, insistir en que el calvinismo moderno como un movimiento sea conocido por su pasión por el evangelismo. ¿Dónde están los calvinistas evangelistas? Yo puedo pensar en un ejemplo destacado: John Blanchard (hay seguramente más, pero en este momento no puedo pensar en algún otro famoso calvinista, viviendo ahora, quien haya dedicado sus ministerios principalmente a la evangelización)

Por supuesto, me doy cuenta que la caricatura arminiana del calvinismo histórico como “anti-evangelización” es una total mentira. Pero uno difícilmente podría argumentar que la evangelización es una característica clave del calvinismo moderno. Ni los escritos que producimos ni las conferencias que tenemos se enfocan mucho en la evangelización.

Sólo-Críticos La base de los calvinistas de hoy está más en el molde de Pink, Boettner y J.I. Packer; en vez que ellos fueran como Spurgeon o Whitefield. En otras palabras, el calvinismo moderno está produciendo mayormente estudiantes y críticos, no evangelistas ni predicadores.

Esto es por que el calvinismo de internet es simplemente demasiado académico y teórico, y no se preocupa lo suficiente con el ser “hacedores de la Palabra”, lo opuesto a ser oidores (Stg 1:22) En gran medida, creo que a esto es lo que el internet anima.

Anti-Intelectualismo Esto puede sonar como una contradicción con mi punto anterior, pero ambas tendencias contribuyen a la superficialidad del calvinismo de internet. ¿Quiere un ejemplo? Recientemente recibí una pregunta por correo electrónico que es muy típica de lo que he observado durante años entre los calvinistas de internet. Alguien a quien no conozco y cuyo nombre no voy a divulgar me escribió para pedirme:

“¿Puede usted explicar en un párrafo o menos la forma de dar sentido a la diferencia que usted hace entre los aspectos “decretivo” y “preceptivo” de la Voluntad de Dios? Por favor no me vaya a dar una lista de libros y artículos para leer. Un párrafo. Una oración si usted puede hacerlo. Por que esa idea parece loca para mí. Hasta ahora, nadie ha sido capaz de describirlo en una forma que tenga sentido. Yo no tengo tiempo para leer diez tomos de reflexiones de una persona muerta y escritos en prosa puritana. Y no me refiera un artículo del pastor Piper sobre el tema, es demasiado largo y complicado. Yo solo quiero una respuesta corta”

¡Exacto! El enfoque rápido y sucio para dilucidar los misterios del universo. Y cada foro en internet, al parecer, tiene al menos uno o dos calvinistas imberbes “recién iluminados”, que están convencidos de que su comprensión se convirtió de repente en todo perfecta cuando abrazaron la soberanía de Dios. Algunos de ellos imaginan que cualquier dificultad que ellos aun no puedan explicar, puede ser fácilmente resuelta por un simple movimiento a una posición más extrema.

El aumento del calvinismo en Internet en la década de 1990 parece haber generado un movimiento grande y sin precedentes de los calvinistas áridos que usan la arrogancia como si fuera el uniforme del equipo. Esa clase de “fuego”, “disparo a la cadera” es desagradable. No culpo a nadie por horrorizarse por esto. Estoy preocupado por aquellos que piensan que es una cosa buena.

Obviamente aquellas críticas son mayormente generalizaciones, y ellas no necesariamente se aplican a todo calvinista en internet (y aquí está la parte difícil) estoy deseoso en admitir que han habido tiempos cuando cada una de aquellas críticas pudieron legítimamente ser aplicadas a algo que yo escribí en algún foro público en algún lugar. Yo especialmente confieso, para mi vergüenza, que soy demasiado “hombre de debate”, y no lo suficientemente evangelista.

El calvinismo histórico no se supone que debe ser de esa manera. Sí, el calvinismo es viril, es implacable cuando se trata de la verdad, y no siempre es fácil de tragar. Pero está lleno de verdades que deberían humillarnos y llenarnos con compasión; en vez de arrogancia y orgullo. El mejor calvinismo siempre ha sido fervientemente evangelístico, de gran corazón, bondadoso, misericordioso y perdonador. Después de todo, se supone que las doctrinas de la gracia tratan de todo eso.

Hasta que volvamos allí, algunas de las cargas que el movimiento reformado está llevando, lo tiene bien merecido.

Mientras tanto, mi consejo para los jóvenes calvinistas es que aprendan su teología de los autores calvinistas históricos, no de los blogs ni de los foros de discusión de internet. Algunos de los foros pueden ser de ayuda en dirigirlo a más recursos importantes. Pero si usted piensa de ellos como un sustituto para el seminario, usted está probablemente yendo a convertirse en un calvinista horrible-y si le golpean en la cara con un huevo podrido, es probable que se lo merezca.

sábado, 3 de diciembre de 2011

Cruzando la Línea del Calvinismo Histórico

El miércoles pasado, uno de nuestros hermanos me comentaba de un audio que estaba escuchando cuyo predicador era “reformado”; pero que le llamó la atención el comentario que éste hizo del versículo que se encuentra en Proverbios 16:4 cuando afirmaba que: “Dios ha creado al impío con el propósito expreso de condenarlo eternamente”. La primera pregunta que salió de mi boca fue ¿Cómo sabes que era reformado? La respuesta del hermano fue “Por que cree en las doctrinas de la gracia”

Así como este hermano cree, muchos también entienden de la misma forma: “Basta creer con las doctrinas de la gracia (DG), para concluir que tal persona tiene sana doctrina”

Nada más equivocado hermanos. Yo he conocido personas que “creen” en las DG pero que también enseñan que una persona salva puede estar en Adán y en Cristo al mismo tiempo. También a otros que “creen” en las DG, pero niegan el “Señorío de Cristo” como evidencia de salvación en la vida del redimido. A otros también que “creen” en las DG pero no tienen la más mínima idea de la “Doctrina de la Iglesia”, etc.

Pero ese no es el tema para esta entrada; sino lo que se conoce como “hiper-calvinismo”

La palabra “hiper-calvinista” debe ser definida con la intención de evitar malos entendidos. Un “hiper-calvinista” no es una persona “muy activa en las doctrinas de Calvino” tampoco es alguien “más calvinista” que los demás reformados. Un “hiper-calvinista” es alguien cuya doctrina y pensamiento ha ido mas allá de lo enseñado por el reformador.

Esta forma de doctrina ha tenido un crecimiento notable en los usuarios del internet en los últimos años. ¿Por qué ha encontrado un terreno favorable en internet? Creo que la razón es que muchos de ellos han visto a las DG como la explicación más consistente de lo que es el evangelio, pero (al mismo tiempo) ellos no tienen fundamentos doctrinales suficientes para comprender lo que se queda dentro del marco de la sana doctrina y lo que sobrepasa a ella. Pareciera que existe más simpatía y aceptación con aquellos que más condenan a otros que no piensan de la misma forma, pero no existe un estudio de sus otros postulados.

Cierta vez se me ocurrió preguntar a algunos hermanos “calvinistas” (o reformados) si habían leído la obra de Juan Calvino “La Institución de la Religión Cristiana” (un libro que tiene como 1,300 páginas) las respuestas fueron increíbles, un altísimo porcentaje de “calvinistas” no habían leído a Juan Calvino (Pero claro, son calvinistas, reformados, etc.)

Phillip R. Johnson ha propuesto una definición quíntuple. El dice:
“La definición que propongo destaca cinco variedades de hiper-calvinismo, que se enumeran aquí en un orden decreciente, de la peor clase a una variedad menos extrema (lo que algunos podrían preferir a la clase como "ultra-alto calvinismo")”:

Un hiper-calvinista es una persona que bien:

  1. Niega que el llamado del evangelio se aplique a todos los que escuchan, o

  2. Niega que la fe sea el deber de todos los pecadores, o

  3. Niega que el evangelio haga alguna "oferta" de Cristo, la salvación y misericordia a los no elegidos (o niega que la oferta de la misericordia divina es gratuita y universal), o

  4. Niega que exista tal cosa como la "gracia común", o

  5. Niega que Dios tenga algún tipo de amor por los no elegidos.
Abordando el versículo del Libro de los Proverbios 16:4 “Todas las cosas ha hecho Jehová para sí mismo, y aun al impío para el día malo” (RV 1960) La afirmación que hizo el predicador “Dios ha creado al impío con el propósito expreso de condenarlo eternamente” proviene de una exégesis equivocada y no responsable. Además, esa conclusión tampoco concuerda con el pensamiento de Calvino ni de otros comentaristas reformados del pasado.
Juan Calvino en su “Institución de la Religión Cristiana Libro III Cap XXIII Num 8, escribe lo siguiente:
Como la causa y la materia de la perdición del hombre residen en él mismo, su condenación es justa. Así pues, si los pelagianos, maniqueos, anabaptistas, o epicúreos - pues con estas cuatro sectas nos enfrentamos al tratar, de esta materia - alegan como excusa la necesidad con que se ven constreñidos por la predestinación de Dios, no dicen nada que dé validez a su causa. Porque si la predestinación no es sino una dispensación de la justicia de Dios, la cual no deja de ser irreprensible aunque sea oculta, así como es del todo cierto que ellos no eran indignos de su predestinación, a tal fin, también lo es que la ruina en que caen por la predestinación de Dios es justa. Además, su perdición de tal manera depende de la predestinación de Dios, que al mismo tiempo ha de haber en ellos causa y materia de ella2 Cayó el primer hombre porque así lo había Dios ordenado; mas, por qué fue ordenado no lo sabemos. Pero sabemos de cierto que Él lo ordenó así porque veía que con ello su Nombre sería glorificado. Al oír hablar de gloria,  pensemos a la vez en su justicia; porque es necesario que sea justo lo que es digno de ser alabado. Cae, pues, el hombre, al ordenarlo así la providencia de Dios; mas cae por su culpa3. Poco antes había declarado el Señor, que todo cuanto había hecho era "bueno en gran manera" (Gn 1:31). ¿De dónde, pues, le vino al hombre aquella maldad por la que se apartó de su Dios? Para que no pensase que le venía de Su creación, el Señor con su propio testimonio había aprobado cuanto había puesto en él. El hombre, pues, es quien por su propia malicia corrompió la buena naturaleza que había recibido de Dios; y con su caída trajo la ruina a toda su posteridad. Por lo cual, contemplemos más bien en la naturaleza corrompida de los hombres la causa de su condenación, que es del todo evidente, en vez de buscarla en la predestinación de Dios, en la que está oculta y es del todo incomprensible. Y no llevemos a mal someter nuestro entendimiento a la inmensa sabiduría de Dios, y que se le someta en muchos secretos.

Porque en las cosas no lícitas y que no es posible saber, la ignorancia es sabiduría, y el deseo de saberlas, una especie de locura.

2Ese "de tal manera" es digno de ser notado. Lo que Dios decreta no se realiza en sus criaturas bajo el imperio de la "coacción". Ninguna concepción determinista puede conciliarse con la omnipotencia de Dios, a la cual destruye. Sabemos, por otra parte, que la "necesidad", en el sentido definido por Calvino, deja libre curso a la libertad y a la voluntad. En una fórmula ceñida, el profesor Augusto Lecerf gustaba decir: "Creemos en un Dios todopoderoso, es decir, capaz de realizar libremente en el plano de las criaturas, lo que necesariamente quiere respecto a Él mismo".

3Hay, pues, dos causas en la caída del primer hombre: una causa oculta, la voluntad insondable de Dios; y una causa evidente, la falta de Adán adornado de libre albedrío. Dejemos a un lado la causa incomprensible y reconozcamos la causa evidente, la de la responsabilidad del hombre. Hay que buscar la causa de nuestra ruina en nuestras propias faltas y no en los secretos que Dios no ha juzgado oportuno darnos a conocer.

(el subrayado es mío)
John Gill, un hiper-calvinista clásico comenta de este mismo versículo de la siguiente manera:
No es el sentido de este texto, ni de ningún otro pasaje de la Escritura, que Dios hizo al hombre para condenarlo, ni tampoco es que esto se deduce de la doctrina de la predestinación: Dios hizo al hombre, ni para condenarlo ni para salvarlo, sino para su propia gloria, y ella está asegurada, ya sea en su salvación o condenación, ni tampoco hace Dios o los hombres malos, El hizo al hombre recto, y el hombre se hizo a sí mismo malo, y, siendo así, Dios puede con justicia destinarlo a la condenación por su maldad, en lo cual glorifica a su justicia. (Traducción: Guillermo de Lama)
En el mismo sentido, el hermano también comentaba acerca de otro versículo citado en la misma predicación: Ro 9:13 “Tal como está escrito: A JACOB AME, PERO A ESAU ABORRECI”

Aquí debemos detenernos y pensar: ¿Aborrece Dios de la misma manera que aborrece el hombre? ¿Qué significa este “aborrecer” dentro del contexto del capítulo, luego dentro del contexto del libro; y finalmente dentro del contexto de la Biblia?

Un estudio cuidadoso del pasaje nos llevará a una conclusión distinta a la que el predicador del mensaje quería llegar. Citando otra vez a John Gill (hiper-calvinista clásico), quien con respecto a este versículo en particular escribe en sus comentarios:
(…) amor eterno e inmutable es la verdadera causa y el origen de la elección de personas particulares a la salvación eterna, y el odio es la causa del rechazo, entendiendo por tal un odio no positivo, que sólo puede tener por objeto al pecado y a los pecadores, o personas así consideradas; sino un odio negativo, que es la voluntad de Dios, no dar vida eterna a algunas personas; y se manifiesta por un abandono de ellos, sin prestar atención de ellos, pasando por alto a ellos, cuando escogió los demás; por lo que la palabra "aborrecer" se utiliza para el abandono, no prestar atención, donde el odio positivo, no se puede pensar que tendrá lugar, como en Lc 14: 26 Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre y madre, a su mujer e hijos, a sus hermanos y hermanas, y aun hasta su propia vida, no puede ser mi discípulo. (Traducción: Guillermo de Lama – el subrayado es mío)
Albert Barnes, sobre este mismo versículo comenta lo siguiente:
Esto no significa ningún odio positivo, sino que había preferido Jacob y a Esaú le había retenido los privilegios y bendiciones que Dios había conferido a la descendencia de Jacob.
Esta fue una parte de la explicación que compartí con el hermano quien me preguntó sobre este tema. Esta entrada es para animar a los hermanos a profundizar en las enseñanzas de las Escrituras por medio de una exégesis responsable; y a la vez comparar los resultados de los estudios con lo que los grandes maestros del pasado concluyeron en cuanto a la interpretación de las Escrituras.

Siempre recomiendo que la Biblia sea nuestra fuente principal de estudio, pero también estudiar el pensamiento de hombres a quienes Dios, sin lugar a dudas, capacitó espiritualmente de manera excepcional en el pasado. Haciendo esto, estaremos menos propensos a cometer errores en lo que Dios quiso decir por lo que dijo en Su Palabra escrita.